Llega el 8 de marzo, un día muy esperado para muchas personas que se suman a las marchas feministas reclamando una sociedad igualitaria, en la que desaparezca el patriarcado con todos sus mandatos y sus formas opresivas hacia la mujer.
Se ha repetido la costumbre durante años de regalar a las mujeres alguna rosa o algún detalle en los entornos laborales, siempre con la mejor intención, para felicitarlas por este día. Pero como sociedad, ya hemos llegado a un punto en que debemos revisar estos saludos. ¿Qué expresa «feliz día» en el 8M? ¿Por qué salimos a las calles? ¿Realmente somos conscientes de la implicancia de la lucha feminista? Más que saludos y detalles, las mujeres deseamos por encima de todo el cese de la violencia de género, derechos igualitarios, el fin de la estructura patriarcal. Así que, ante un panorama así, ¿cómo podríamos saludar en este día?
Es la pregunta que se hizo el Grupo Idea cuando pensó hacer un pequeño acto en su empresa para sus trabajadores y trabajadoras con motivo de las reivindicaciones del 8M. La respuesta que surgió fue la de convocarnos, como agrupación feminista, para invitar a pensar y a reflexionar en los fundamentos de la lucha feminista. Fundamentos basados en datos concretos – no en opiniones – de las situaciones de violencia y desigualdad que sufren las mujeres en nuestro país.
Este gesto empresarial es mucho más que una mera invitación. Es un signo de esperanza que muestra el interés por construir una sociedad más justa y respetuosa, donde nuestros hijos puedan vivir libres de los mandatos del patriarcado y nuestras hijas puedan gozar de los mismos derechos y vivir sin miedo a sufrir violencia de género.
Gracias por la invitación y seguimos disponibles para quienes deseen abrir un diálogo respetuoso y constructivo en sus lugares de trabajo.
